Contribución del Lic. Julio Salomón Montes, experto, miembro del Programa Sabios & Expertos.
La importancia de conocer y enfrentar la problemática ocasionada por los efectos de la pandemia del COVID-19 en el desarrollo económico y social de El Salvador es de suma prioridad para poder plantear recomendaciones aplicables a las pequeñas y medianas empresas en sus condiciones particulares. Para tal efecto se plantea la elaboración de un Plan de Acción, para el Ordenamiento Administrativo de las empresas.
El ordenamiento administrativo es uno de las componentes del desarrollo de toda empresa, con el cual estas mantienen su enfoque en los objetivos establecidos y la buena implementación de acciones que les ayuden a alcanzar sus metas. Es importante para toda empresa ser congruentes al momento de crear estrategias, por lo que consideramos importante llevar a cabo una planificación conscientemente elaborada, y así lograr una ejecución eficiente de los cursos de acción programados.
En esta ocasión nos centramos en el ordenamiento administrativo financiero. Este análisis es especifico para cada empresa y se centra en crear un plan de acción a llevarse a cabo en cuatro fases:
- Fase Critica.
- Fase de Recuperación.
- Fase de Reactivación.
- Fase de Desarrollo.
En cada fase, la empresa deberá identificar los problemas actuales de manera general y especifica, para así analizarlos y proponer estrategias para resolverlos, medidas y acciones que formarán parte de nuestras estrategias, los costos y los responsables de su ejecución. Debido al entorno en el que nos encontramos a raíz de la pandemia COVID-19, debemos iniciar los analísis lo más pronto posible, ya que algunas empresas necesitarán planificar y llevar a cabo sus estrategias de solución para la fase critica más pronto que tarde.
Para realizar el análisis de la fase critica las recomendamos llevar a cabo los siguientes pasos:
- Llevar a cabo una evaluación actual de ingresos y gastos.
- Manejar eficientemente un programa de austeridad empresarial.
- Elaborar un listado de prioridades, identificando las imprescindibles, y necesarias para el funcionamiento.
- Revisar inventarios y calcular tiempos de consumo, etc.
- Considerar otras alternativas de funcionamiento o de alianzas con otras empresas.
- Analizar actividades en los niveles de importancia para: ejecutar, posponer o eliminar.
- Reducir funciones.
- Maximizar el uso de recursos informáticos y redes sociales disponibles, asi como nuevas opciones de modernización.
- Reforzar comunicación con clientes y proveedores.
- Negociar con los empleados, las condiciones salariales y prestaciones con base a los ingresos reales actuales de la empresa, de conformidad con el marco legal vigente, en la medida de lo posible sin menoscabo del bienestar de los trabajadores.
- Reducir funciones, actividades y consumo de servicios, materiales y suministros, que generen gasto y que no sean imprescindibles.
- Contar, preparar y mantener un fondo previsional que vele por el funcionamiento normal de la empresa en condiciones de emergencia.
- Analizar la posibilidad de contar con un seguro de índole laboral, para cubrir gastos derivados de emergencia nacional u otros.
Para solicitar una asesoría ad-honorem de parte del Programa Sabios & Expertos las pequeñas y medianas empresas pueden llenar este formulario.